Trader ejecutivo, entre las finanzas y las relaciones

La actividad del trader ejecutivo

El trader ejecutivo realiza una actividad que puede identificarse a medio camino entre la del propetary trader y la del Sales. De hecho, el trader ejecutivo trabaja para un gerente de portafolios, para fondos de coberturas, una compañía aseguradora, etc. Su rol es el de comprador, recibe órdenes de compra de los gerentes que realizan los proyectos de inversión de sus clientes. Al contrario que el trader prop, él no tiene poder de decisión, la elección de las inversiones no le pertenece.

Sin embargo, llevar a cabo órdenes no es su única tarea, lo que el gerente podría hacer muy bien el mismo (y que hace en las empresas mas pequeñas). Su rol comprende optimizar la decisión del gerente, realizando la compra de la mejor manera posible, en las mejores condiciones. Para eso, esta en contacto permanente con los brokers, Sales, y otras figuras encargadas de la venta de activos, con el fin de obtenerlos al mejor precio. Une vez efectuada la transacción él elabora un reporte para el gerente.

El rol del trader ejecutivo no es simple, esta encargado de mejorar la inversión teniendo un pequeño margen de maniobra. Debe dominar perfectamente los mercados financieros. Su misión primordial consiste en recuperar la información de diversas fuentes y sus cualidades relacionales se vuelven entonces su principal herramienta y capital.

Formación y remuneración del trader ejecutivo

La dualidad entre conocimientos financieros y habilidades comerciales demanda al trader ejecutivo una trayectoria similar a la de un Sales. Es necesario que haya cursado un programa de estudios en finanzas de mercado, al igual que una formación en comercio y comunicación. El CIT entrega los conocimientos y la experiencia requerida, pero el alumno que quiera convertirse en trader ejecutivo tendrá que completar su diploma CIT con una formación apropiada.

La dificultad del quehacer del trader ejecutivo justifica sus altos ingresos anuales, los que pueden ir desde los 35 mil euros al momento de ser contratado a 60 mil después de 3 años de experiencia, sin considerar los bonos. Sin embargo, estos últimos son claramente menos significativos que los de un trader clásico, el trader ejecutivo no es quien corre los riesgos en la toma de decisiones.